Ante el apagón eléctrico generalizado registrado el lunes 28 de abril en todo el territorio nacional, Facsa activó su Plan de Contingencia para minimizar su impacto en el suministro de agua a la ciudadanía.
En coordinación con las administraciones locales, la compañía puso en marcha sistemas de alimentación eléctrica alternativa -equipos electrógenos- en aquellos puntos más críticos de la red de abastecimiento y saneamiento, para compensar la falta de fluido eléctrico. Asimismo, reforzó los sistemas de monitorización remota para asegurar el control operativo de las redes y las instalaciones.
El sistema de monitorización remota y la coordinación operativa de los equipos técnicos sobre el terreno han sido claves para evitar incidencias relevantes en el suministro y aplacar las consecuencias del corte eléctrico en la población.
Facsa continúa trabajando para retomar la normalidad lo antes posible y lamenta las molestias que esta situación —originada por causas ajenas a su actividad— pueda ocasionar.